Harto estoy. Harto estaba ya de las sucursales de las grandes cadenas de establecimientos situadas en ciudades más o menos pequeñas, cuando me entero ahora, a través de un amigo, de que es probable que la edición coleccionista llegue ¨un poco más tarde¨ que la estándar. ¿Porqué demonios tienen que suceder estas cosas? ¿Dónde están el plan de distribución y comunicación entre establecimientos, todos esos eslabones de la cadena del mecanismo de la compra-venta? Más importante: ¿Cómo pueden vendernos la moto con una fecha de salida a la venta, sin ni siquiera informarnos de posibles retrasos en ediciones limitadas o especiales?
Por mi parte, aunque esperaré a ver cómo termina la cosa (pero sabiendo lo que me sucedió con mi otra reserva, cuya edición especial llegó 6 días después de la fecha de salida oficial y, cabe decir, simultánea con la estándar), no pienso volver a reservar nada en mi ciudad, vamos, que me voy a una tienda de Barcelona, aunque pague 0,70 del billete de transporte público porque, no me jodas, ¿Qué les cuesta? Podréis considerar mi reacción un poco infantil y excesiva, pero francamente, suficientes disgustos me he llevado ya con la tienda en cuestión, puñaladas de dependientes falso-agradables e inumerables impedimentos (¨No sé si te puedo vender el juego¨, una frase que, dicha tres dias antes de la fecha oficial tiene sentido, pero siete después no) para adquirir sus productos en la fecha y del modo por los que he pagado como para seguir tragando.
Perdón por el parrafón, es cosa de la indignación.
