Lo que tenéis que hacer es muy simple. En este mismo tema tenéis que contar vuestras vivencias más terroríficas relacionadas con Final Fantasy y títulos relacionados y opinar sobre las del resto. ¿Cuál ha sido tu hazaña de FF más terrorífica? ¿Qué es aquello que más miedo os ha dado? ¿Qué escena de Final Fantasy os ha hecho dar un respingo de pavor? Ilustrad si podéis vuestra historia con una imagen, un audio o un vídeo, no se os recompensará con dinero, pero os ganaréis todo el respeto de este manguta que os habla.
Ahí va la mia.
Era de noche, y jugaba por primera vez a Final Fatasy IV (Final Fantasy III americano con un emulador que no permitía barra espaciadora). Estaba solo en casa y yo tenía unos 17 años. Sabin y Cyan se adestraban por el bosque fantasma… aquello os lo digo de verdad, me estaba imponiendo mucho respeto… y aquella historia de la estación fantasma, el dolor de Cyan, me estaba poniendo los pelos de punta. Yo estaba en tensión y de repente, el teléfono de casa comienza a sonar. De un salto me levanté acojonado por la tensión en la que me encontraba. Contesto al teléfono y nadie responde. Yo ya estaba acojonado del todo, la atmósfera tenebrosa de aquellos píxeles me estaba poniendo al borde de un ataque de nervios. Los altavoces dejaron de funcionar como por arte de magia, pero no me extrañó porque el cable estaba muy pelado. Pensé que era el volumen así que estuve trasteando con él. Después traté de ajustar el cable… y comenzó a sonar a todo volumen. Casi me caigo de culo! Por cierto, la llamada me enteré al día siguiente que había sido mi abuela, de la que es muy habitual colgar rápido de impaciencia.
Pero os aseguro, que nunca un videojuego creado con sprites y píxeles me había metido en semejante atmósfera.
Esa misma sensación de aquí va a pasar algo chungo la sentí el año pasado en el Distant Worlds 25 aniversario, donde tocaron por primera vez el tema del Bosque Fantasma y el tren ídem, como impone el maldito bosque! Aunque esta vez la tensión del momento sucumbió en un momento cómico con las siguientes palabras de Seikon-Shoukougun : “Cómo Sabin le haga el súplex al tren, me parto”
¡Truco o trato para vosotros!