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[/center]Leí en un artículo en internet que este juego era una carta de amor de Square-Enix a los amantes de los Final Fantasy clásicos y no se me ocurre mejor descripción para este juego. Que las este juego exista, en una época en que los gráficos y la inmediatez lo son todo, es algo así como un milagro. Un Final Fantasy de 'vieja escuela' en los tiempos que corren es algo bastante especial. Y esto es sólo la punta del iceberg. Square Enix ha dado a los aficionados de Final Fantasy una carta de amor a los juegos de antaño que construyeron los cimientos de nuestro amor por los juegos que disfrutamos ahora. Lo que es viejo ahora es nuevo otra vez.
Empecemos por decir que, técnicamente, este juego entra en la saga de los Final Fantasy Legends, pero lo han renombrado DImensions. Dimensions es un juego enorme, con una historia que es la definición misma de la épica. Se desarrolla a lo largo de cuatro capítulos enormes y tiene lugar en un mundo que ha sido desgarrado por fuerzas mágicas en dimensiones separadas de la luz y la oscuridad. Se controla un gran elenco de personajes a través de dos historias diferentes pero entrelazadas en un intento de corregir los problemas de dicho mundo.
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[/center]El corazón del juego, al contraro que en los últimos Final Fantasy, son los personajes. La mayoría tienen sus propias motivaciones para hacer lo que están haciendo y descubrir sus historias nos deleitará a cada paso. Ahondar en los personajes es muy divertido, casi tanto como la exploración de las más profundas mazmorras en el juego. Sumado a esto está que en realidad controlamos dos tipos totalmente diferentes de personas: Los guerreros de la Luz y los Guerreros de la Oscuridad, y que ambos tratan de averiguar por qué el mundo ha sido tan terriblemente dañado. Durante el transcurso del juego también se van uniendo al grupo otros personajes. Casi cada miembro del grupo tiene un secreto, un poco de motivación por la que están ahí, y el descubrimiento de esas es una de las alegrías más grandes en el juego.
Cabe destacar el sistema de oficios, que es algo con lo que Square ha estado jugando y refinando desde Final Fantasy III . Tus personajes inicialmente empiezan como pizarras en blanco, sin verdadera característica que defina claramente (en algunos aspectos si) sus estilos de lucha. Con el tiempo podrás desbloquear oficios, lo que permite personalizarlos a tu gusto. Van desde los más típicos como magos blancos y los guerreros, a los un poco más esotérico como monjes, ladrones y draconarius. Cada oficios tiene diferentes capacidades, habilidades, armaduras y limitaciones de armas y favorecen algunas estadísticas sobre los demás. Se puede cambiar el oficio de un personaje cuando se quiera, así que si un ladrón no está funcionando para ti, entonces quizás los poderosos puños de un monje puedan remediarlo. Hay que tener cuidado, ya que sólo hay un número limitado de "puntos de trabajo" para gastar en subirlos de nivel.
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[/center]A mi personalmente también me han encantado la multitud de guiños que este juego tiene al resto de Final Fantasy, coimo la cola de rata arriba mostrada que en Final Fantasy I era un objeto clave y ahí se ningunea o que en un momento dado una contraseña sea "Rosa del desierto". Curiosamente dos objetos que hay en la tienda de La Capital Olvidada
. Hay muchas más, pero no voy a destripároslas todas, evidentemente, comprad el juego y disfrutadlas por vosotros mismos.[center]
[/center]Por si esto fuera poco también hay otros gruiños a la cultura popular...por ejemplo este que pillé referenciando el famoso: "His power level is over 9000!" Curiosamente, como habréis visto en el tema de Cloud en este juego, suele ser Alba la que mete estos guiños.
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[/center]Ya solo me queda decir, sin spoilers, que el tramo final del juego es espectacular, así que si lo jugáis no os atasquéis u os perderíes algo grande.
El precio del juego 16'95 cuando lo compré yo completo es una ganga si tenemos en cuenta las 56 horas de juego que hay que completar solo para pasártelo, y que aun te quedan misiones post-game por detrás. La historia es enorme, los personajes agradables y en general es un juego divertido de jugar, y aparte de que a veces sea dificil controlar al personaje andando, el juego funciona fantásticamente bien en la pantalla táctil. Los menús, en particular, presentan un diseño elegante. La música y los gráficos contribuyen notablemente a la creación de un mundo que nos recuerda que lo viejo y lo nuevo pueden coexistir, y lo hacen con aplomo y estilo.
Desde luego, con todos los palos que se ha llevado Square-Enix últimamente, deberían poner al equipo que creó este juego a dirigir todos los demás que creen, menudo oasis en el desierto.
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